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Por Sonia Gupta / AEnigma
Los satélites que orbitan alrededor de Marte: Fobos y Deimos, los hijos del dios de la guerra han suscitado diversas controversias a lo largo de nuestra breve historia espacial.
Ya en el s. XVIII un escritor acertó a mencionar cuántas lunas tenía Marte y aún más, se aproximó a indicar su distancia hasta el planeta e incluso sus períodos de revolución más de un siglo antes de que fueran descubiertos.
Esto es mencionado por Carl Sagan y Iósif Shklovski, dos científicos de renombre que se atrevieron a proponer, en una obra conjunta, que Fobos y Deimos estarían huecos y que podrían ser artificiales.
Tal vez, construidos desde cero o tal vez, vaciando parte de un cuerpo ya existente y posicionándolo en órbita. Pero quienes lo hubieran llevado a cabo, habrían sido los miembros de una civilización con una tecnología tan avanzada que nos resultaría casi increíble.
Algunos han querido ver en diversas fotografías realizadas por diferentes sondas espaciales indicios de intervención artificial en estos satélites, sobre todo en Fobos, en donde aparecen por toda su superficie unas misteriosas líneas rectas paralelas, un monolito y una misteriosa imagen que mostró Marina Popovich en una rueda de prensa indicando que un misterioso objeto derribó a la sonda soviética Fobos II cuando iba a aproximarse al cuerpo.
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