Aceite de palma: perjudicial para la salud y el ambiente

El aceite de palma es uno de los aceites más utilizados en el mundo. Se obtiene de los frutos de la llamada Palma africana (Elaeis guineensis) y se lo encuentra como materia prima tanto en alimentos como en productos cosméticos.

Este aceite es uno de los ingredientes presentes en alimentos procesados de panadería, apertitivos, snacks salados, productos precocinados, cremas untables, coberturas, etc. Y es tan utilizado porque es muy económico, agradable al gusto y de textura untuosa estable a cualquier temperatura. También tiene mayor durabilidad ya que se oxida menos que otros aceites.

Los problemas en el uso y consumo del aceite de palma

Problemas ambientales

Para instalar monocultivos de palma aceitera, se tala la selva nativa de países como Indonesia y Malasia con efectos irreversibles en ese importante ecosistema y su biodiversidad.

La deforestación a gran escala pone en riesgo el hábitat de especies amenazadas como el orangután o el tigre de Sumatra que se encuentran al borde de la extinción.

En el caso del tigre de Sumatra se calcula que actualmente quedan menos de 400 individuos no solo por la pérdida de su hábitat sino porque los cazan en las cercanías a las plantaciones con la excusa de su “peligrosidad”.

Además, como cualquier tala de bosque o selva, genera emisiones de CO2 que contribuyen a la crisis climática actual.

aceite de palma, deforestación, animales en extinción, grasas trans, cáncer, colesterol, orangutanes, tigres, elefantes, selva nativa, CO2, cambio climático

Perjuicio para la salud

Desde el punto de vista nutricional no es una opción saludable, ya que se trata de un aceite muy rico en grasas saturadas similares a la mantequilla (en torno a un 50%), grasas que, según los expertos, contribuyen a aumentar los niveles de colesterol, provocando la obstrucción de las arterias, lo cual conlleva problemas coronarios.

Se lo encuentra con frecuencia en productos ultraprocesados porque se trata de un ingrediente barato que otorga textura y apariencia agradables al consumidor.

Un estudio pudo comprobar su nocividad para la salud. Varias personas consumieron una dieta a base de aceite de palma y tan sólo en 5 semanas aumentaron su colesterol LDL (colesterol malo)

Además, los estudios científicos llevan a relacionar el consumo de esta sustancia con el cáncer. La Agencia Europea de la Seguridad Alimentaria (EFSA) afirma que cuando el aceite de palma se calienta a más de 200ºC en procesos industriales produce ácidos grasos con la capacidad de modificar el ADN y provocar cáncer. Mientras que el Institut de Recerca Biomèdica (IRB) de Barcelonapodía concluyó según sus ensayos en laboratorio, que este ingrediente podría tener un efecto directo en metástasis.

Lamentablemente, se estima que el uso de aceite de palma aumentará en los próximos años como sustituto de las grasas trans, menos saludables aún.

Desigualdad social

Este aceite es el más barato en el mercado, en gran medida debido al trabajo infantil o forzado que se utiliza en los cultivos, así como los salarios injustos que reciben los trabajadores.

Otras problemáticas se dan en torno a este nefasto cultivo como trabajadores intoxicados por productos prohibidos. Además de desplazamiento de poblaciones indígenas, amenazas y hasta asesinatos.

aceite de palma, deforestación, animales en extinción, grasas trans, cáncer, colesterol, orangutanes, tigres, elefantes, selva nativa, CO2, cambio climático

Cómo detectar el aceite de palma en los productos?

Una manera fácil de evitar su consumo es dejar de comprar productos ultraprocesados como galletas, pan, pan dulce, pastelillos empaquetados, helado, fideos instantáneos y margarina.

Desafortunadamente el uso de aceite de palma no es siempre visible en el etiquetado, especialmente cuando se utilizan sus derivados como colorantes, saborizantes o emulsionantes.

Sin embargo, es posible revisar en la lista de ingredientes si contiene: aceite vegetal, grasa vegetal y lauret sulfato de sodio (productos de limpieza).

Otra manera es leer la tabla nutricional; si 40% de las grasas totales en un producto procesado vienen de grasas saturadas es muy probable que este producto contenga aceite de palma.

Algunos fabricantes y distribuidores de alimentos evitan poner su nombre claramente en el etiquetado, por lo que puede aparecer con nombres como: aceite de palmiste, grasa vegetal (palma), grasa vegetal fraccionada e hidrogenada de palmiste, Sodium Palmitate, Estearina de palma (Palm stearin), Palmoleina u Oleina de palma (Palmolein), manteca de palma o Elaeis guineensis (su nombre científico).

Opciones

En la medida de lo posible, lo mejor es preparar la comida en casa con aceites más saludables, como el de oliva o el de girasol o elegir productos que sustituyan el aceite de palma por otro tipo de grasa más saludable como por el ejemplo el aceite de girasol. También se puede buscar la etiqueta de certificación de la RSPO. Aunque todavía está poco implantada en Europa, distingue productos de empresas que han dado un paso adelante para conseguir una producción más sostenible.

Fuente consultada: Union for Concerned Scientists. Fact Sheet. Palm Oil and Global Warming. Disponibilidad: www.ucsusa.org/sites/default/files/legacy/assets/documents/global_warming/palm-oil-and-global-warming.pdf.

Vídeo de Juan Llorca en el que explica muy bien por qué no es recomendable consumir aceite de palma y, sobre todo, qué alimentos de los que más consumen nuestros hijos lo contienen:

Ecoportal.net

Fuente

Deja una respuesta

Deja un comentario