por Por Extranotix
Un residente de Maryland, EE. UU., contactó al investigador paranormal Lon Strickler y le contó sobre su traumática experiencia de ser abducido por extraterrestres.
El hombre, cuyo nombre se desconoce, afirma que después de este incidente, no solo creyó completamente en la existencia de extraterrestres, sino que también se convenció de que los Hombres de Negro existen y están conectados entre sí.
“Vivo en Kensington, Maryland, en el condado de Montgomery. Y este evento NO fue un sueño o una alucinación.
Una noche de septiembre de 2017, me desperté a la 1:30 a. m. con un sonido como si algo crujiera fuertemente. Pensé que era un ladrón, así que tomé mi arma del cajón de mi mesa de noche y caminé hacia la puerta del dormitorio, listo para enfrentar al intruso.
Pero cuando toqué el pomo de la puerta, me desmayé. Cuando me desperté, me encontré completamente desnudo y acostado en un contenedor de cristal que tenía la forma de una píldora grande. La tapa estaba abierta, así que salí con tropiezos y me paré en el suelo junto al contenedor.
Me sentía como si estuviera drogado y apenas podía caminar. Pensé que alguien me había secuestrado, así que comencé a decidir urgentemente cómo salir de aquí.
La habitación en la que me encontraba parecía estar hecha de materiales compuestos, concreto y plástico, con luces fluorescentes. Salí cojeando al pasillo y resultó ser un túnel con un brillo azulado. Atravesé el túnel y pronto salí a una gran sala cilíndrica, con algunos vehículos colgados de ganchos a lo largo de las paredes.
Estos eran vehículos humanos, en su mayoría autos y motocicletas japoneses y alemanes, pero algunos vehículos claramente pertenecían al ejército estadounidense.
En el centro de la habitación se encontraba lo que parecía un árbol de metal de seis pisos de altura con hojas azules brillantes. Al observarlo más de cerca, este árbol resultó ser un gran cilindro de metal, y las hojas eran cápsulas, muy similares a aquella de la que yo acababa de escapar.
Dentro de estas cápsulas había personas y el interior de las cápsulas emitía un brillo azul neón.
Cuando miré hacia arriba, noté lo que parecían ser cables azules moviéndose en una zona oscura hacia el techo. De repente, estos “cables” flotaron hacia mí y se dieron la vuelta, mostrándome sus rostros.
Sus rostros tenían grandes ojos oscuros y estrechas aberturas en lugar de nariz y boca. En realidad es difícil describir cómo se veían, pero sobre todo se veían como extraterrestres “grises” rodeados por un montón de tentáculos.
Había tres de estas criaturas, una de las caras me sonreía, y las otras dos fruncían el ceño. Luego, durante unos 10 minutos, hubo una “conversación” entre el rostro sonriente y yo, pero yo estaba tan agotado y ellos eran tan superiores a mí que no hubo intercambio de información valiosa entre nosotros.
Luego perdí el conocimiento nuevamente, y cuando desperté, vi que estaba acostado sobre un piso de cristal. Me sentía tan cansado que ni siquiera quería moverme, pero levanté la cabeza para mirar alrededor.
La habitación era redonda y de unos 150 metros cuadrados de superficie, era de un color blanco brillante y estéril. Dentro de la habitación había una de esas criaturas con tentáculos, pero estaba ocupada con algo y estaba de “espaldas” hacia mí, controlando un conjunto de elementos extraños que no tenían botones ni palancas.
El piso era transparente, y cuando miré hacia abajo, pude ver que lo que había dentro surgía de un profundo agujero negro excavado en la llanura cubierta de hierba. Cuando despegamos y volamos hacia arriba, la cubierta de piedra cerró este agujero.
Fue entonces cuando me di cuenta que estaba dentro de una nave espacial que había despegado de un búnker subterráneo ubicado en algún lugar de la Tierra. Y entonces volví a perder el conocimiento.
Me desperté de un fuerte golpe y al abrir los ojos me di cuenta de que estaba en mi cama. Revisé mi teléfono y marcaba las 6:30 de la mañana. Todo el “viaje” había durado exactamente cinco horas.
No entraré en más detalles, pero descubrí que me habían implantado un objeto en la pierna derecha y me habían cauterizado la herida.
Cuatro días después de esta abducción, me encontré con unas personas vestidas con trajes negros. Nunca antes había creído en los OVNIs ni en los Hombres de Negro, pero ahora no tengo elección.
Ahora me molesta que no haya un lugar oficial para obtener información legítima o ayuda sobre este tema, ya que esta experiencia fue traumática para mí y cualquier claridad habría ayudado a solucionarla. MUFON (el sitio web principal de ovnis en los EE. UU.) simplemente me ignoró, así que decidí ponerme en contacto con ustedes” .
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