Las muertes ‘con COVID-19’ entre los doblemente vacunados fueron más altas que cualquier otro subgrupo, según un reciente informe del servicio de salud escocés.
Nuevos datos de la autoridad sanitaria de Escocia muestran que la infección y la hospitalización ‘por COVID-19’ son más probables entre quienes han recibido al menos una inyección de la vacuna COVID que entre quienes no han recibido ninguna de las inyecciones, y que la muerte después de una doble dosis es mucho más probable que sin haber recibido ninguna inyección.
El último informe sobre COVID del Public Health Scotland (PHS) muestra que las tasas de casos para las personas que dieron positivo por el virus fueron consistentemente más bajas entre los no vacunados desde el 11 de diciembre hasta el 7 de enero, salvo la primera semana en la que los triplemente vacunados parecían tener una tasa levemente más baja que los no vacunados.
Los que recibieron doble dosis reportaron constantemente la tasa de infección más alta, experimentando el doble de la tasa de infección de los que no recibieron la ‘vacuna’ en tres de las cuatro semanas, y solo un poco menos del doble de la tasa en la semana restante.
Los vacunados con una y tres dosis experimentaron tasas de infección más bajas que las vacunadas con dos dosis durante el mismo período, pero aun así registraron un promedio de entre 1,3 y 1,4 veces el número de infecciones entre vacunados y no vacunados.
Con respecto a la hospitalización ‘con Covid-19’, los que recibieron una inyección doble tenían más probabilidades de ser admitidos que todas las demás categorías, incluidos aquellos que no habían recibido una sola dosis de la vacuna, y nuevamente informaron más del doble de admisiones en la última semana del informe que los no vacunados.
Aquellos que recibieron una inyección de refuerzo tenían menos probabilidades de ser hospitalizados, y los que recibieron una inyección mostraron más admisiones que los que no recibieron la inyección en solo una semana.
Los que recibieron doble pinchazo también representaron significativamente más muertes ‘con COVID-19’ por cada 100,000 personas que los que no recibieron pinchazos en el período de cuatro semanas del 4 de diciembre al 31 de diciembre.
Los que recibieron doble pinchazo sufrieron 137 muertes durante el período, frente a los 46 fallecidos que no recibieron la ‘vacuna’ en el mismo período de tiempo. Proporcionalmente, eso da como resultado un promedio durante las cuatro semanas de 4,8 muertes por 100.000 entre los no vacunados y 7,67 por 100.000 entre los doblemente vacunados.
Aquellos que recibieron una sola dosis murieron a una tasa proporcional más alta que los que no recibieron la inyección en dos de las cuatro semanas, mientras que aquellos que recibieron una dosis de refuerzo mostraron la tasa de mortalidad más baja ‘con COVID-19’ entre las cuatro categorizaciones.
El PHS ha intentado explicar el fuerte aumento de infecciones, hospitalizaciones y muertes entre las personas positivas en COVID que recibieron dos inyecciones culpando a las personas mayores de 70 años que aún no han recibido una dosis de refuerzo.
“Este grupo de personas mayores de 70 años que han recibido dos dosis de la vacuna pero aún no han recibido un refuerzo pueden incluir algunas personas muy vulnerables”, indicó el informe.
Una portavoz del PHS agregó que «el estado de vacunación de los casos, los pacientes hospitalizados y las muertes no debe usarse para evaluar la efectividad de la vacuna debido a las diferencias en el riesgo, el comportamiento y las pruebas en las poblaciones vacunadas y no vacunadas».
Inglaterra y Gales, los vecinos nacionales de Escocia, también informaron infecciones récord y tasas más altas de COVID entre las personas vacunadas en todos los grupos de edad mayores de 18 años. Los vacunados también han llegado a dominar las hospitalizaciones y muertes ‘por COVID’ en el resto del Reino Unido, como se muestra en el último informe semanal de COVID de la Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido.
Además, la profesora Gili Regev-Yochay, investigadora israelí, ha dicho que los resultados preliminares de un estudio sobre la eficacia de un segundo refuerzo, o cuarta dosis, muestran que la cosecha actual de inyecciones contra el COVID «no es lo suficientemente buena» ya que han demostrado ser «menos efectivas» contra la supuesta cepa omicron.
Visto en: Trikooba News
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