Por RT
La medida se aplicará solo en «circunstancias extraordinarias o de fuerza mayor que lo justifiquen». La organización de consumidores Facua la considera «irresponsable».
El Gobierno de España dio luz verde este miércoles a que, de forma excepcional y temporal, los supermercados puedan limitar la cantidad de artículos que venden a los consumidores.
La medida se publicó en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y forma parte de las acciones urgentes del «plan nacional de respuesta a las consecuencias económicas y sociales» del conflicto en Ucrania.
En concreto, se modifica un apartado del artículo 9 de la Ley Ordenación del Comercio Minorista que estipulaba que los comerciantes no podían limitar la cantidad de artículos a los clientes.
El nuevo apartado dice: «Excepcionalmente, cuando existan circunstancias extraordinarias o de fuerza mayor que lo justifiquen, los establecimientos comerciales podrán suspender con carácter temporal la prohibición (…) de limitar la cantidad de artículos que puedan ser adquiridos por cada comprador».
También destaca que esas medidas tienen que «estar justificadas» y deberán adoptarse de forma «proporcionada cuando sea necesario para impedir el desabastecimiento y garantizar el acceso de los consumidores en condiciones equitativas».
«Guiados por el nerviosismo»
«A veces se producen ciertas alarmas y alertas que generan comportamientos guiados por el nerviosismo», comentó a los medios la titular de Transporte, Raquel Sánchez.
Muchos supermercados españoles llevan semanas sufriendo escasez de artículos como el aceite de girasol debido al conflicto en Ucrania (principal productor de esta grasa) o de leche por los paros de los transportistas. También se comenzó a notar la ausencia de harina y, en ocasiones, legumbres, pasta, arroz o ciertos tipos de comida enlatada.
En este sentido, la ministra mandó un mensaje de calma a los ciudadanos, a quienes pidió «responsabilidad».
Por su parte, la organización de consumidores Facua consideró una «irresponsabilidad» la medida. «Estas limitaciones son las que provocan el acaparamiento de bienes y el desabastecimiento, además de permitir la especulación con los precios con el argumento de la escasez de los productos a la venta», denunció en un comunicado.
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