Las películas más malditas de la historia del cine

Por Mundo Esotérico y Paranormal

El mundo cinematográfico está lleno de historias extrañas y trágicas: asesinatos sin resolver, catástrofes en el set de rodaje, misteriosos accidentes y extraños giros del destino. A veces, una serie de calamidades se alinea como una flecha del destino siniestro que apunta a una producción cinematográfica en particular. A lo largo de los años, la película se ha ganado una popularidad: ¡está maldita!

Por supuesto, hay quien cree que las maldiciones no son reales, que los humanos encontramos patrones en eventos aleatorios de forma innata y nos enfocamos en la evidencia que respalda una narrativa emocionante o espeluznante. Según los escépticos, suceden todo tipo de contratiempos en los sets de filmación, y el azar dicta que a veces suceden eventos terribles en el mismo rodaje. Sin embargo, hay películas que desafían toda lógica y racionalidad.

Dicho esto, es complicado definir qué se necesita exactamente para que una película sea considerada maldita. Algunos films son tristemente conocidas por las muertes en el rodaje, mientras que otras las tragedias ocurren con el paso del tiempo y afectan directamente a los miembros del equipo. Finalmente, hay algunas películas que están embrujadas. Prepárate para conocer algunas de las películas más malditas de la historia del cine.

Poltergeist

No podemos comenzar este viaje por las producciones cinematográficas malditas sin Poltergeist. Considerada como como la película más maldita de todos los tiempos, es prácticamente la definición necesaria de lo que necesita una película para ser maldita.

La historia básica es la siguiente: muchos actores de la película murieron inesperadamente. Las tres películas de Poltergeist se estrenaron en 1982, 1986 y 1988, respectivamente. Las dos muertes que parecen dar más fuerza a la maldición son las de las estrellas Dominique Dunne y Heather O’Rourke.

Ambas murieron inesperadamente en extrañas circunstancias y a edades muy tempranas. Dunne, de 22 años, fue estrangulada por su ex novio a finales de 1982, unos meses después del estreno de Poltergeist. O’Rourke murió en 1988, después de acabar rodaje de Poltergeist 3.

Le diagnosticaron erróneamente gripe, pero en realidad sufría un bloqueo intestinal que le provocó un ataque cardíaco y, en última instancia, sepsis. Ella tenía 12 años. Las muertes de Will Sampson y Julian Beck también se relacionaron a la maldición, pero ambos murieron por problemas de salud que ya sufrían.

Sampson tenía 53 años y murió de complicaciones después de un trasplante de corazón y pulmón en 1987; Beck, de 60 años, murió de cáncer de estómago en 1985. Y por si fuera poco, la actriz JoBeth Williams reveló que se usaron esqueletos reales en la escena de la piscina en la primera parte de poltergeist, algo que corroboran varios miembros del equipo de rodaje.

La Profecía (The Omen)

Esta película de terror sobre el Anticristo niño e infligiendo todo tipo de caos satánicos a las personas que lo rodeaban se estrenó en 1976. Una serie de catástrofes rodearon la producción de la película, lo que llevó a la leyenda de la maldición de “La Profecía”. ¿Dónde empezó la maldición? El hijo del actor Gregory Peck se suicidó justo antes de que comenzara el rodaje.

El avión de Peck fue alcanzado por un rayo mientras volaban Londres, al igual que el avión de un productor. El hotel de Londres donde se alojaban ese mismo productor y otros sufrió una tentado por el IRA (Ejército Republicano Irlandés). El restaurante donde se tenía que reunir parte del elenco y el equipo también sufrió un atentado.

El avión privado que contrataron para filmar tomas aéreas se estrelló en el despegue, aunque en este caso se salvaron a algunos miembros del equipo. Un trabajador de un santuario de animales donde filmaron varias escenas murió atacado por un tigre. Sin embargo, uno de los aspectos más inquietantes de la maldición fue el accidente de tráfico que involucró a John Richardson, quien había diseñado los efectos especiales de “La Profecía”.

Estaba en Holanda unos meses más tarde trabajando en la película “Un puente lejano (A Bridge Too Far)” cuando su automóvil sufrió un choque frontal. Resultó herido y la asistente Liz Moore murió por decapitación. Richardson afirmó que se despertó para ver una señal de tráfico que mostraba la distancia hasta la siguiente ciudad. Resultó ser la ciudad holandesa de Ommen. La distancia fue de 66,6 kilómetros.

Superman

La «maldición» de Superman afectó la televisión y las películas. George Reeves se suicidó en 1959, después de interpretar al icónico personaje en la popular serie de televisión “Las Aventuras de Superman (Adventures of Superman)”.

Algunos dijeron que no se encontraron sus huellas en el arma y sugirieron que el actor fue asesinado. En cuanto a las películas, Christopher Reeve se había retirado del papel de Superman cuando sufrió un accidente al caerse de un caballo en 1995 y quedó tetrapléjico.

Murió en 2004 a los 52 años víctima de un ataque cardíaco. Los otros acores que interpretaron a Superman y que también sucumbieron a la maldición fueron Dean Cain, Brandon Routh y Tom Welling, estos en forma de “muerte artística”.

Rebelde sin causa (Rebel Without a Cause)

Rebelde sin causa es una película legendaria que será recordada para siempre. Lamentablemente, tres de sus actores no pudieron llegar al éxito, ya que desaparecieron antes de tiempo. James Dean murió en un accidente de trafico poco después de terminar el rodaje, con solo 24 años. 

Sal Mineo fue asesinado frente a su casa en 1976, a los 37 años. Natalie Wood se ahogó en 1981, a los 43 años, en un suceso que inicialmente se consideró un accidente, pero posteriormente la policía lo consideró un posible asesinato.

El mago de Oz (The Wizard of Oz)

Otra icónica película que sufrió todo tipo de desgracias fue “El mago de Oz (1939)”. El Hombre de Hojalata original, interpretado por el actor Buddy Ebsen, tuvo que abandonar el rodaje después de contraer una infección pulmonar por el maquillaje. 

Pero eso no es todo. Extras de monos voladores cayeron de sus cables, la Bruja Mala del Oeste sufrió diversas quemaduras, e incluso el adorable perrito Totó se rompió una pata. Y si todo esto no es suficiente, también nos encontramos con un suicidio rodado por accidente de uno de los actores con enanismo.

En las primeras versiones de la cinta se podía ver una sombra negra con forma humana colgando de un árbol cuando Dorothy, el Espantapájaros (Ray Bolger) y el Hombre de Hojalata (Jack Haley) van dando brincos y cantando “We’re off to see the wizard” cuando se dirigen a Ciudad Esmeralda. Al parecer se trataba de uno de los “munchkin” de Pequeñilandia (el lugar donde despierta Dorothy tras el tornado).

La conjura de los necios (A Confederacy of Dunces)

¿Es posible que una película sea maldita sin que nunca se haya convertido en una película? John Kennedy Toole escribió esta novela satírica antes de su suicidio en 1969. Fue publicada póstumamente en 1980 y ganadora del Pulitzer en 1981.

Los esfuerzos para convertirla en una película comenzaron casi de inmediato, pero fracasaron por la muerte del actor principal en todo momento. Primero iba a ser dirigida por Harold Ramis y protagonizada por John Belushi. Belushi murió. John Candy firmó para ser el protagonista. Él murió. Chris Farley fue el siguiente actor adjunto a la película. Él murió.

Se tenía previsto rodar una versión con Will Ferrell, pero no murió. En cambio, el jefe de la Comisión de Cine del Estado de Luisiana fue asesinado (La conjura de los necios se desarrolla en Nueva Orleans), y el huracán Katrina destruyó partes de la ciudad que eran necesarias como locaciones. La película permanece sin rodar.

Atuk

Esta maldición es extraña porque es básicamente lo mismo que “La conjura de los necios”. Es el caso raro en el que una sola maldición es tan poderosa para afectar a dos películas de comedia. Casi todo es igual: John Belushi iba a protagonizar esta sátira sobre un cazador inuit en la ciudad de Nueva York, pero murió. John Candy y Chris Farley también iban a interpretar a Atuk en varias ocasiones, pero murieron antes de que comenzara la producción.

La diferencia con “Atuk” es que la película estaba a punto de ser filmada con el comediante Sam Kinison. El propio Kinison exigió el control creativo del proyecto y quiso reescribir la mayor parte del guion, y luego supuestamente amenazó con no interpretar bien su personaje si no conseguía su objetivo. Hubo demandas, pero todo acabó con la muerte de Kinison en un accidente de tráfico. Otro guion cinematográfico sin filmar.

Estas son solo algunas de las películas más malditas de la historia del cine, pero hay muchas más. El cuervo (The Crow), El exorcista (The Exorcist), La Pasión de Cristo (The Passion of the Christ), ​ La semilla del diablo (Rosemary’s Baby), El conquistador (The Conqueror) o Annabelle son algunos de los ejemplos de que el mal se encuentra en la pequeña y gran pantalla.

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