Por Kontrainfo
El Consejo de Ministros de Italia ha aprobado este miércoles la inoculación obligatoria contra el coronavirus para mayores de 50 años. La medida entrará en vigor a partir del próximo 15 de febrero y se prolongará, por lo menos, hasta el 15 de junio y se aprobará mediante un decreto.
En el país transalpino, donde unas 3 millones de personas en Italia han optado por no inocularse contra el Covid, algunos profesionales, como los sanitarios, los profesores o las fuerzas del orden están obligados a vacunarse, o de lo contrario son suspendidos de empleo y sueldo. El gobierno italiano también evalúa establecer la obligatoriedad de inocularse a todos los mayores de 18 años.
El primer ministro del país, el elitista ex presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, ha explicado, según Corriere della Sera, que con la implantación de la obligatoriedad de la inoculación el ejecutivo pretende “empujar a los italianos que aún no se han vacunado a que lo hagan”.
La semana pasada, el Gobierno decidió que el certificado sanitario reforzado (que solo se obtiene cuando se está inoculado o se ha pasado la enfermedad) va a ser obligatorio desde el 10 de enero para acceder a los medios de transporte, además de a hoteles, ceremonias o festivales; mientras que por ahora se pide en el ocio y la restauración.
Draghi quería ampliar la utilización de este pasaporte reforzado a más actividades, como servicios públicos, de cuidado personal o centros comerciales, pero no ha sido posible este miércoles por la reticencias de algunas fuerzas de la coalición gubernamental, como la Liga, que lo interpretaba como una vacunación obligatoria enmascarada para todo el mundo, según los medios italianos.
La medida se toma al tiempo que en Francia se perturban los ánimos ante los dichos soeces del presidente Emmanuel Macron: “En cuanto a los no vacunados, realmente tengo muchas ganas de joderles la vida”, dijo al periódico Le Parisien en una entrevista, utilizando el verbo francés “emmerder”, derivado de la palabra “merde” que significa “mierda”, la palabra se considera jerga vulgar en Francia. Y agregó“limitar tanto como sea posible su acceso a las actividades de la vida social”.
En cuanto a la campaña de vacunación, el 89,13% de la población italiana de más de doce años ya tiene al menos una dosis y el 86,07% ha completado el ciclo, mientras que la de refuerzo se ha inoculado al 67,67% de la población diana. Con casi el 90% de su población vacunada Italia ha registrado en las últimas 24 horas un nuevo récord de contagios, con 190.000 nuevos casos, lo que a las claras muestra el fracaso de dicha estrategia.
Las autoridades, por el contrario, lejos de reconocer este fracaso, eligen como chivo expiatorio culpar y castigar al 10% que eligió no inocularse sustancias génicas experimentales en sus cuerpos, de los que se desconocen los efectos adversos a mediano y largo plazo y ocultar que la baja tasa de hospitalizaciones frente a la cantidad de casos se debe a la característica de la nueva variante Ómicron, de alta contagiosidad pero muy leves efectos sobre la salud, comparables a un resfrío común.
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