por Visto en: Activist Post
Hungría ha vetado el acuerdo histórico de la Unión Europea para imponer una tasa impositiva mínima global a las empresas multinacionales para 2023.
El acuerdo, que ha estado en proceso durante años y fue acordado por más de 130 países , impondría una tasa impositiva corporativa mínima del 15 por ciento a las empresas multinacionales que ganen más de 750 millones de euros en todo el mundo, aparentemente para evitar la evasión fiscal internacional.
“Hungría vetó la medida la semana pasada durante una reunión de ministros de finanzas de la Unión Europea en Luxemburgo, lo que podría poner en peligro el acuerdo porque se requiere una decisión unánime entre el bloque de votantes de 27 miembros para que adopte la iniciativa”, informa Fox News.
Según el ministro de Finanzas húngaro, Mihály Varga, “En tales circunstancias, implementar el impuesto mínimo global causaría un daño grave a la economía europea”.
A pesar del obstáculo, el ministro de Finanzas francés, Burno Le Maire, insiste en que la UE perseverará en su búsqueda de crear un impuesto global.
“Tan pronto como se resuelve un problema, surge otro”, dijo antes de agregar: “Al final llegaremos allí”.
De acuerdo con BDO Canadá, el intento de imponer el primer impuesto corporativo global del mundo tiene como objetivo abordar las empresas multinacionales que a menudo utilizan países extranjeros como paraísos fiscales mientras se benefician de las ventas nacionales, eludiendo así sus obligaciones fiscales.
“El pilar dos [de la solución de dos pilares de la OCDE para los paraísos fiscales] ha captado la mayor atención, ya que introduce una tasa impositiva mínima global del 15 %”, escribe BDO Canadá.
“A diferencia del Pilar Uno, que redistribuye las ganancias, se espera que el Pilar Dos genere US$150 mil millones de ingresos adicionales para los gobiernos. La nueva tasa impositiva mínima se aplica a las empresas con ingresos superiores a EUR € 750 millones, que es el mismo umbral según las reglas de informes país por país. Las reglas proponen la exclusión de ciertas entidades (como ciertas organizaciones internacionales, gobiernos, organizaciones sin fines de lucro, fondos de pensiones y fondos de inversión) y ciertos ingresos (5% del valor en libros de los activos y la nómina)”.
Es un gran problema en la era de los activos digitales y los viajes por todo el mundo. Sin embargo, la idea de una organización global no elegida que grava a las corporaciones y redistribuye la riqueza tiene a muchas personas más que un poco preocupadas.
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