Datos oficiales muestran que en Islandia se reportaron 11 lesiones graves de niños que recibieron vacunas Covid frente a 0 casos graves de la enfermedad en niños durante toda la pandemia

Por DAILYSCEPTIC| FRETTIN

Visto en: Trikooba Blog

Según el periódico en línea islandés  Fréttin , la Agencia de Medicamentos de Islandia ha recibido 107 informes de efectos secundarios de las vacunas Covid en niños, de los cuales 11 se clasifican como graves.

Un efecto adverso grave se define como un efecto de un fármaco que conduce a la muerte, a una afección potencialmente mortal, a la hospitalización o a la prolongación de la hospitalización o que causa discapacidad o defectos congénitos en humanos. Además, los informes que se consideran clínicamente importantes se clasifican como graves.

La tasa de efectos adversos notificados frente a los experimentados, así como la proporción de efectos notificados que en realidad se ha demostrado que son inducidos por la vacuna, siguen sin estar claras, pero según las estimaciones, la tasa de notificación de efectos adversos es bastante baja.

Según un amplio  estudio de investigación , se notifican menos del 1 % de los efectos adversos de las vacunas y, en general, se notifican del 1 al 13 % de los efectos adversos graves de los medicamentos. Según un  artículo reciente  en el  Icelandic Medical Journal , los estudios muestran que, en general, se notifican menos del 10 % de los efectos secundarios de las vacunas.

Fréttin  ha entrevistado a varias personas que han resultado gravemente heridas después de las vacunas contra el covid y en ninguno de esos casos los médicos o las autoridades sanitarias informaron de los hechos, aunque en algunos casos lo hicieron los propios pacientes.

¿Cuál podría ser entonces el número real y la tasa de incidencia de los efectos adversos graves experimentados por las vacunas COVID-19 experimentados por los niños islandeses?

En el grupo de edad de 5 a 11 años se han inyectado 19.083 niños. No se han informado efectos adversos graves en ese grupo. Una posible explicación podría ser que menos niños en este grupo recibieron dos inyecciones y la dosis de vacuna para esta edad fue menor.

En el grupo de edad de 12 a 15 años se han inyectado 15.404 niños (el 79% de 19.499 niños), según la web oficial . Se han notificado cuatro casos de efectos adversos graves. Si asumimos una tasa de notificación del 1%, esto significa 400 eventos graves, o uno de cada 39 niños. Si asumimos una tasa de notificación del 10%, tenemos 40 casos de efectos adversos graves, uno de cada 385 niños.

En el grupo de edad de 16 a 17 años,  los reporteros de Fréttin  asumen que el 80 % ha sido vacunado (este grupo de edad está incluido en el grupo de 16 a 29 años, que tiene una tasa de vacunación del 90 %). Se han reportado siete casos graves. Asumiendo una tasa de notificación del 1%, esto significa 700 eventos graves, uno de cada 11 niños. Suponiendo una tasa de notificación del 10 %, tenemos 70 casos de efectos adversos graves, uno de cada 105 niños.

En total, se han inyectado 41.814 niños de 5 a 17 años (68,55% del total de niños de este grupo de edad) y se han notificado 11 efectos adversos graves. Suponiendo que se informe el 1 % de los efectos secundarios graves, esto equivale a 1100 casos graves, uno de cada 38 niños. Suponiendo una tasa de notificación del 10 %, obtenemos 110 casos, uno de cada 380 niños.

En este contexto, es interesante observar los hallazgos de un estudio islandés reciente,  Infecciones por SARS-CoV-2 en niños islandeses , publicado en Pediatric Infectious Disease Journal . El período de estudio es del 28 de febrero de 2020 al 31 de agosto de 2021.

Los investigadores siguieron los resultados de todos los niños diagnosticados con COVID-19 durante el período de estudio. Descubrieron que las infecciones en las escuelas eran raras, ningún niño fue hospitalizado con COVID-19 y ninguno tenía síntomas graves. Este estudio está en línea con los resultados de un gran  estudio sueco  realizado en 2020 en casi dos millones de niños.

Curiosamente, dos de los autores del estudio participaron activamente en  impulsar  la vacunación infantil a principios de este año, a pesar de sus propios hallazgos.

Como los informes de efectos adversos no se investigan para determinar la causalidad, es difícil determinar qué porcentaje de efectos adversos experimentados son realmente causados ​​por las vacunas. Pero la cantidad de informes, junto con la tasa de informes estimada, en comparación con una  tasa esperada  de efectos adversos graves de las vacunas contra la influenza de uno a dos por millón, indica que la incidencia es muy alta en comparación. Incluso si se asume que no hay subdeclaración, sigue siendo un asombroso 268 por millón. Esto es similar a las  cifras alemanas recientes .

Teniendo en cuenta que el estudio mencionado anteriormente que encontró que las complicaciones graves de COVID-19 en niños son prácticamente inexistentes, esto plantea serias dudas sobre el impulso continuo de la vacunación infantil.

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