Por Helium 24

¿Quién no ha sentido una energía densa al estar en alguna parte o en presencia de una persona?

En el mundo de la ciencia, es común oír decir que todo es energía, lo cual no sería diferente en nosotros y por nosotros.

Parece algo de ciencia ficción o una simple historia paranormal, sin embargo, la ciencia ha demostrado que los seres humanos somos continuamente afectados por las energías del entorno.

A esta conclusión se llegó gracias a un estudio realizado en algas, hecho por la terapeuta y médica Olivia Lee Bader. Ella señala que lo que le sucedió a las plantas marinas también puede aplicarse a los seres humanos.

“El cuerpo humano es muy similar a una planta que chupa y absorbe la energía necesaria para alimentar su estado emocional; también puede energizar las células o aumentar la cantidad de cortisol para alimentar a las células dependiendo de sus necesidades”.

“Esto explica por qué hay personas que se sienten incómodas cuando están con ciertos grupos de personas”. -Olivia Lee Bader

Otro estudio de la Universidad de Bielefield, en Alemania, indica que las plantas son capaces de absorber la energía de otras plantas a su alrededor. Analizado esto desde la bioenergía, los humanos también serían elementos en juego. De lo que se trata, es que todo lo que interactúa con el entorno está cargado y esa carga puede traspasarse de un “personaje” a otro.

El profesor Olaf Kruse y su equipo estudiaron una planta llamada Chlamydomonas reinhardtii, la cual no sólo lleva a cabo el proceso de fotosíntesis, sino que también puede absorber energías de otras plantas para mantenerse activa. Los estudios apuntan a que nuestros cuerpos físicos son como esponjas, absorben lo que hay en el ambiente.

“Es la primera vez que este comportamiento se confirma en un organismo vegetal. Estas algas pueden digerir la celulosa contradiciendo todos los apuntes anteriores. En cierta medida, lo que estamos viendo son plantas que se alimentan de las plantas”. -Olaf Kruse

Conclusiones

La Energía se transmite de unos a otros. Pura física. Cuando 2 personas interaccionan, se produce un intercambio de Energía, Este intercambio es mayor cuanto más largo es el periodo en el que las personas están en contacto.

Cuando una persona tiene buena Energía, siente que todo está bien. Está contento, piensa con claridad, está optimista. Todo fluye. En este estado, uno saca lo mejor que tiene.

Cuando una persona tiene Energía de baja calidad, no ve las cosas claras, se siente perdido, desesperanzado, lleno de miedos, etc. En este estado, uno muestra las cosas malas que tiene. Una versión de uno mismo mejorable.

Es muy difícil que, cuando dos personas hablan, ambas estén en el mismo nivel de Energía. De hecho es casi imposible. Siempre hay uno que tiene la energía de mejor calidad que el otro. Cuando dos personas hablan, lo habitual es que pase una de estas 2 cosas:

1. El que está mal baja al que está bien

2. El que está bien sube al que está mal.

Consejos

Cuando sientas que te bajaron tu energía, es decir te empiezas a sentir cansado o pesado por la situación, puedes alejarte ó tomar consciencia de que el problema lo tiene el otro. Que no es tuyo. Al identificar que la cosa no es tuya, decides no sentirla. Y, si no la sientes, no la padeces.

Puede parecer egoísta, pero no lo es en absoluto. De hecho, todo lo contrario. Si eres capaz de no contagiarte, como tu Energía es de mejor calidad, conseguirás subir al otro.

Deja una respuesta

Comentarios

No hay comentarios aún. ¿Por qué no comienzas el debate?

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *