Por Miguel Jara
Publicamos anteayer novedades sobre las vacunas contra el virus del papiloma humano: Con las vacunas VPH hay más cáncer y mortalidad por todas las causas. En concreto, estas inmunizaciones aumentan significativamente el cáncer y la mortalidad por todas las causas sin pruebas de una reducción de los cánceres relacionados con el citado virus.
Citábamos entonces el trabajo que están haciendo dos médicos, Juan Gérvas y Mercedes Pérez. Ellos publican de nuevo. No solo afirman que causa más daños que beneficio. También explican que la vacuna contra el virus del papiloma «carece de efectividad en las mujeres infectadas previamente».
La vacuna contra el virus del papiloma no es curativa, no sirve para curar lesiones del cuello del útero (resultados anormales de la citología, o tras conizaciones):
La vacuna nunca le ayudará a vencer la enfermedad’, deberían decir los ginecólogos».
Juan Gérvas y Mercedes Pérez.
¿Es dañino el virus del papiloma?
En general, los virus del papiloma no provocan daño alguno y desconocemos su papel en la fisiología humana. De 150 tipos de virus del papiloma, unos 15 tienen capacidad cancerígena y sólo cuando persisten infectando durante años (entre 20 y 30 años seguidos).
Dichos virus llegan a la vagina y al cuello del útero a través de la actividad sexual y allí infectan a las células produciendo una reacción inmunológica que “aclara” (elimina) la infección en más del 90% de los casos. En España es causa rarísima de muerte, el 0,3% de las mujeres (el 99,7% mueren de otra causa).
Respecto al virus del papiloma hay las denominadas vacunas preventivas (Gardasil y Cervarix) que se emplean profilácticamente para prevenir el contagio por virus del papiloma en niñas y niños sin relaciones sexuales previas, «inútiles como poco», según Gérvas y Pérez.
Pero es que además, y esto es lo más grave, como documentan estos médicos, es que el uso profiláctico, preventivo, de la vacuna del papiloma se asocia a mayor mortalidad global y a mayor mortalidad por todo tipo de cáncer (sin disminución de la mortalidad por cáncer de cuello de útero).
Más muertes pese a las vacunas
En España, el Conjunto Mínimo Básico de Datos demuestra que se está incrementando el número de ingresos hospitalarios por cáncer de cuello de útero, y los datos del Instituto Nacional de Estadística el incremento de la mortalidad por cáncer de cuello de útero desde la implantación de la vacuna contra el papiloma:
Tasa anual promedio de hospitalización por cáncer de cuello de útero, por 100.000 mujeres: entre 1998-2008 de 11,4 desde la vacuna 2009-2022 de 15,2.
Tasa anual promedio muertes por cáncer de cuello de útero 1998-2008 de 2,6 y desde la vacuna 2009-2022 de 2,7. En estas tablas podéis verlo:
Eso en España. Australia es un país que se dice está «erradicando» el cáncer de cuello de útero por su precoz y persistente campaña de vacunación. Se dice que han evitado el 90% de los casos de cáncer de cuello de útero, pero los datos lo desdicen. Es lo contrario:
Dato mata relato. Como argumentan Gérvas y Pérez:
No es sencillo explicar estos ‘inesperados’ resultados pero tenemos que rechazar las explicaciones fáciles y triunfalistas, y la ‘vacunancia’ (atribuir ‘buenos resultados’ casi mágicamente). Se hace propaganda de la vacuna del papiloma«.
Deja una respuesta