Por Belle Carter / Natural News
La Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC), la agencia del cáncer de la Organización Mundial de la Salud (OMS), ha declarado que la extinción de incendios es una ocupación causante de cáncer .
El programa de Monografías de IARC convocó a 25 expertos internacionales de ocho países para una reunión en Lyon.
El resumen de la reunión se publicó en línea en Lancet Oncology. Clasificó la exposición ocupacional como bombero como cancerígeno para los humanos «sobre la base de evidencia suficiente para el cáncer en humanos».
Del “Grupo 2B: posiblemente cancerígeno para los humanos”, la extinción de incendios se ha trasladado al “Grupo 1: cancerígeno para los humanos”.
La evaluación detallada se publicará en 2023 como Volumen 132 de las Monografías de IARC.
Greg McConville, secretario nacional del Sindicato Unido de Bomberos de Australia, dijo que la IARC de la OMS había confirmado sin lugar a dudas que la profesión de bombero causa cáncer en los bomberos y esto tiene implicaciones importantes para los gobiernos y los servicios de bomberos de Australia.
“Los estudios muestran que en los primeros tres años de la carrera de un bombero, el riesgo de cáncer que enfrentan aumenta en un 150 por ciento, y eso es al observar los cambios reales en el ADN de los bomberos”, señaló McConville.
El secretario general de la Unión de Brigadas de Bomberos (FBU) del Reino Unido, Matt Wrack, también anunció esta noticia » significativa y alarmante » en una circular en su sitio web oficial. Dijo además que la clasificación se puede aplicar a todo tipo de bomberos, y también a hombres y mujeres.
“IARC informa que se observaron asociaciones positivas para el mesotelioma y los cánceres de vejiga, colon, próstata y testículos, y para el melanoma y el linfoma no Hodgkin”, dijo.
Wrack señaló que la categorización de la IARC fortalece su llamado a mejorar los procedimientos de descontaminación, exámenes de salud regulares, registro de exposiciones y legislación presuntiva.
“Lamentablemente, el sindicato se ha encontrado con demasiada frecuencia como una voz solitaria en la campaña para hacer más para proteger a los bomberos del cáncer y las enfermedades. Con suerte, ahora aquellos con la responsabilidad de actuar en el sector se sentarán y escucharán nuestras demandas críticas de seguridad”, dijo.
Estudio: los bomberos del World Trade Center son más propensos a desarrollar cáncer que sus colegas
Un estudio publicado el año pasado encontró que los bomberos que respondieron en el World Trade Center (WTC) después del ataque del 11 de septiembre en 2001 tenían un 13 por ciento más de probabilidades de desarrollar cáncer que los colegas que no trabajaron en el sitio.
Los hallazgos del estudio se pueden encontrar en línea en la revista Occupational & Environmental Medicine. Afirmó que se diagnosticaron unos 915 cánceres en 841 de los bomberos del WTC y 1002 casos en 909 de los otros bomberos.
Los bomberos del WTC tenían un 39 por ciento más de probabilidades de desarrollar cáncer de próstata y el doble de probabilidades de desarrollar cáncer de tiroides. En promedio, los bomberos del WTC también tenían alrededor de cuatro años menos cuando fueron diagnosticados y tendían a tener una enfermedad en etapa temprana que aún no se había propagado.
Cuando los materiales de las casas o edificios se queman o se incendian, liberan carcinógenos o agentes cancerígenos como los hidrocarburos aromáticos policíclicos, que es un grupo de más de 100 sustancias químicas. Esto se debe a que los materiales utilizados en las casas y edificios modernos son en su mayoría sintéticos, lo que genera más humo en comparación con los materiales naturales.
También es posible que los bomberos inhalen amianto y escapes de diesel. Estos carcinógenos también se pueden absorber a través de la piel. Por lo tanto, usar el equipo de protección personal adecuado, incluidos los aparatos de respiración autónomos, ofrece protección y reduce la exposición. Pero los productos químicos tóxicos aún pueden penetrar el equipo de protección y exponer la piel a las toxinas.
El 7 de julio de 2018, el entonces presidente Donald Trump firmó la Ley de Registro de Cáncer de Bomberos de los Estados Unidos (HR 931) y se convirtió en ley pública. El proyecto de ley exige que los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades desarrollen y mantengan un registro voluntario de la historia e información ocupacional de los bomberos, que puede vincularse a los datos existentes en los registros estatales de cáncer.
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